lunes, 2 de noviembre de 2009

Mirar el firmamento

El ser humano debe encontrar el Universo y tomar conciencia de 'lo pequeño que es', pero a la vez 'la grandeza' que tiene por formar parte 'probablemente' de la única especie que es capaz de plantear en qué lugar del cosmos se encuentra.
Carl Sagan (November 9, 1934 – December 20, 1996) astrónomo norteamericano desde muy niño me enseño los misterios de la Vía Láctea iluminada por una estrella ordinaria y dentro de un cúmulo de galaxias situado en mitad de la inmensidad del Universo. Invadió mi corazón con la astronomía, y viajaba imaginariamente por los planetas, satélites y cometas del sistema solar, las estrellas, las nebulosas, las galaxias y los grandes elementos y formas del Cosmos. Pero sobretodo abrir interrogantes de la presencia de vida en el infinito espacio sideral
Sembró en mí esa costumbre de no ver a las estrellas sino mirarlas, acariciaras y sentir cuan pequeño y cuán grande es nuestro destino e incentivar a los mortales recuperar la vieja costumbre de nuestros padres de mirar al cielo por la noche, algo a lo que 'vivía antes mucho más conectada, con ese sobrecogimiento que produce una noche estrellada' y con lo que esa acción clarifica conceptos como el devenir del tiempo.

viernes, 30 de octubre de 2009

Antoine De Saint Exupery

Yo creo que llegará el día, en que el enfermo se abandonará a las manos de los médicos. Sin preguntarle nada, estos médicos le extraerán sangre,calcularán algunas variables,multiplicarán unas por otras,curarán a este enfermo con sólo una píldora. Sin embargo, si yo caigo enfermo, me dirigiré a mi viejo médico de familia. El me mirará en el ángulo del ojo, me tomará el pulso, me palpará el vientre, me auscultará. Después toserá, prenderá su pipa, se frotará el mentón, y me sonreirá para calmar mi dolor. Desde luego yo admiro la ciencia, pero también admiro la sabiduría" Antoine De Saint Exupery. París, Abril de 1936

Correa, Nobel de Economía

Correa, Nobel de Economía.
El Parlamento Sueco que concede los Premios Nobel hoy por hoy es en una conspiración circulo rosa, se reúne una vez al año para otorgar unos galardones con la única condición de que ofendan a la inteligencia de, al menos, la mitad del planeta.
Castro, Chávez, Morales y Correa incomprensiblemente todavía no han recibido su Nobel de la Paz o el Nobel de Economía.
“A Obama se le puede inculpar de muchas cosas, pero no de haber hecho algo por la paz como reza la acusación del Parlamento en el texto con que ha hecho pública su elección de este año. El presidente norteamericano prometió cerrar Guantánamo, salir de Irak y acabar con "la misión humanitaria" de Afganistán, pero la base norteamericana en Cuba sigue a pleno rendimiento, los soldados en Irak haciendo exactamente lo mismo que con Bush y Afganistán sigue siendo un avispero de terroristas en guerra abierta contra la fuerza internacional”
Con la concesión del Nobel de la Paz al estafador intelectual de Al Gore hace dos años, medio mundo soltó la gran carcajada. El listón estaba alto, pero debemos reconocer que los parlamentarios han superado el reto con gran solvencia??.
De paso se harán todos una foto con Obama –el verdadero motivo de la concesión–, que lleva camino de convertirse en el manto de la Virgen del Pilar para los progresistas, aunque más sonriente y menos milagroso, como acredita su trayectoria política desde que se convirtió en presidente.
Sólo falta completar la nómina concediendo el Nobel de Economía a nuestro Correa, que se ha cargado la prosperidad de un país entero con sus acostumbradas rosadas, totalitarias, dictatoriales, etc, informes sabatinos, pero, como buen progresista, lo ha hecho con la mejor de las intenciones. Si el Parlamento utiliza el mismo rasero que con Obama, con eso debería ser suficiente. Uno de esto días iría a recoger su premio, ya que en estos últimos meses viaja y viaja.

lunes, 26 de octubre de 2009

Ecuador un país Corrupto

“Nadie piensa, donde todos lucran;
nadie sueña, donde todos tragan.”

José Ingenieros

La cada vez es más numerosa lista de escándalos que salpican al desgobierno de Correa y su entorno. El Ecuador está llegando a los límites impensados en cuanto al grado de corrupción y anomia, donde se pincha sale pus. Muchos argumentaran que la corrupción no es patrimonio de la llamada Revolución Ciudadana, y que no hay país en el mundo que esté libre de ese mal. Sin embargo, los problemas radicas en varios factores como el “modus operandi” ”, es decir en los medios utilizados para acceder a los fines buscados. Las declaratorias de emergencia en los diferentes sectores del estado es proclive a la dedocracia, los contratos no pasan por los organismos de control, etc., etc. Hoy por hoy se sigue escuchado los enriquecimientos ilícitos, el famoso tráfico de influencias, las coimas, los padrinazgos, etc. Son pocas las instituciones que se salvan, respetables por cierto. A tal punto se ha llegado que la pluralidad de casos de corrupción que se esparcen a diestra y siniestra.
Pero frente a estos hechos, quizás haya algo más preocupante todavía: la pasividad del pueblo. La reacción brilla por su ausencia, el ceño fruncido de cualquier transeúnte es el único signo de vitalidad y sangre en las venas que parece tener hoy, el ciudadano ecuatoriano. Y no se trata de pretender revoluciones o cacerolazos mancomunados. Se trata de reaccionar y no dormirse en la creencia de que el voto es la única herramienta.

Doctorcito Juan

Le Saludo con mucha atención y después le ruego, le suplico que me diga la verdad que vio como se encuentra mi caderita me duele demasiado abajo en la columna ya no puedo sentarme ni media hora es un dolor insoportable ayúdeme doctorcito después de Dios confió e usted en su poder de sus manos y en su mente también digo yo habrá vitaminas para los huesos inyecciones tengo los huesos tan decaídos no duermo casi nada tengo un cansancio todo querido decirle pero no he podido cada que me voy ni siquiera puedo venir despidiendo por favor doctorcito sálveme de estas dolencias , antibióticos no porque eso me mata peor perdóneme mi molestia lo hago porque soy un paciente

Adicto - Recuperación- Pasantes - Recaída

Los pasantes
Son estudiantes que realizaban prácticas en el área de la psicología. Aparte de cumplir su obligación dentro del pensum de estudio, aparentemente se incorporaban en buscar la recuperación de los enfermos, ganar su confianza, aprecio y brindarles la colaboración necesaria para disminuir la ansiedad de encontrarse prisioneros de la adicción y del tratamiento.
Tenían horarios establecidos, en un cronograma de actividades que variaba entre lo social y la terapia. Coordinaban la hora lúdica que era de lunes a viernes de 8:30 a 10:30, las yincanas cada 15 días. Además dirigían y sistematizaban las siguientes actividas como músico terapia, aromo terapia, lecturas dirigidas, etc.
Solían venir bien bañados, bien vestidos, bien perfumados y llegaban siempre atrasados con su respectivo mandil, se percibían como seres superiores como divinidades muchos de ellos no incidían en la recuperación del adicto mas aún exacerba su patología por actitudes denigrantes y temperamentales con vocabulario propio de un encierro entre delincuentes y malandrines que distan mucho de la verdadera terapia.
Pero no todos eran miserables uno o dos rescatables buscaban el verdadero “bien estar” del adicto en proceso de recuperación.
Sería de reformular esta actividad, teniendo en cuenta: que el adicto es el enfermo y no al contrario el pasante es el adicto.

jueves, 15 de octubre de 2009

¡Correa un demagogo!

Según la Real Academia de la Lengua Española la demagogia, es una práctica política que consistente en ganarse con halagos el favor popular. Es una degeneración de la democracia, consistente en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder.
La Demagogia (del griego δῆμος -dēmos-, pueblo y ἄγειν -agein-, dirigir) es una idea política que consiste en apelar a emociones (sentimientos, amores, odios, miedos, deseos) para ganar el apoyo popular, frecuentemente mediante el uso de la retórica y la propaganda. Aristóteles la define como "el predominio de los pobres con exclusión de los ricos".[1]
Desde antigua Grecia se ha caracterizado la demagogia por constituirse en una falsificación y una corrupción de la democracia. Demóstenes sentenciaba "Ponte una corona, haz una libación a la estupidez y ataca a tu rival denodadamente". Otra vez en opinión de Aristóteles: "Las democracias se alteran sobre todo por la insolencia de los demagogos".
“El demagogo no necesariamente conduce a las masas a la revolución sino que las instrumentaliza para sus propios fines personales, para proceder, una vez obtenida una amplia aprobación, no ya a un proceso de democratización o de trasformación del sistema sociopolítico, sino a la instauración de un régimen autoritario, del que el demagogo sea el indiscutido y despótico jefe (Führer, Caudillo), o al acuerdo con las autoridades y las instituciones existentes con tal que éstas le reconozcan una función indiscutible. De esta manera los mecanismos represivos acentúan, en lugar de disminuir, las características autoritarias del gobierno y de la sociedad, e impiden la toma de conciencia por parte de las masas.”
El demagogo es un centauro de la vida política cuando empieza su discurso se percibe cual es su intención: el mandato, la dominación, el lucimiento, pero, fundamentalmente, la permanencia en el torbellino del éxito. Es un líder figurativo en el escenario político. El demagogo es egocéntrico y no soporta que otro le "robe" el escenario. Tiene una fluida oratoria insultante contra sus oponentes y su habilidad para halagar al pueblo. El demagogo vive de la exaltación a su imagen, de los aplausos y los elogios. Es un vampiro, con fluida oratoria que succiona la sangre provocativa de sus oponentes y al pueblo que tanto dice querer por su habilidad de halagar con granos de lenteja.